El nuevo gobierno de Yucatán no perdió tiempo en comenzar a trabajar en uno de los temas más críticos para la población: el servicio de agua potable. A solo unas horas de la toma de protesta del Gobernador Joaquín Díaz Mena, se iniciaron visitas y evaluaciones en las instalaciones de la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de Yucatán (JAPAY), marcando un firme comienzo de esta nueva administración.

El contexto no era sencillo. En semanas recientes, la distribución de agua potable en Mérida sufrió varios contratiempos que generaron descontento en la ciudadanía. Hogares y comercios experimentaron cortes prolongados, lo que provocó que el agua, un servicio esencial, se convirtiera en un tema de conversación y preocupación diaria. Frente a esta situación, el Gobernador instruyó a su equipo para actuar rápidamente y atender los puntos más urgentes.

El Director de la JAPAY, Francisco Torres Rivas, encabezó una inspección a las plantas potabilizadoras y zonas de producción, acompañado por gerentes y subdirectores de la dependencia. Durante el recorrido, Torres Rivas afirmó que mejorar la distribución del agua es una prioridad de la nueva administración. «Comienza la ardua tarea de localizar esos ejes y engranes que no están permitiendo brindar la calidad en el servicio», comentó, subrayando el compromiso del Gobernador en elevar los estándares de la JAPAY.

La evaluación inicial de las cuatro plantas potabilizadoras mostró que existen áreas donde se pueden hacer mejoras significativas. Según el Director, estos primeros análisis servirán para plantear proyectos que optimicen el servicio a lo largo de los próximos meses. El objetivo, indicó, es asegurar el abastecimiento continuo los 365 días del año.

Aunque reconoció que el reto es grande, Torres Rivas se mostró optimista y comprometido con la tarea que tiene por delante: «No le vamos a fallar al pueblo que brindó su confianza a nuestro Gobernador», afirmó.

Este primer día de labores marca el inicio de una serie de acciones que buscan no solo resolver los problemas actuales, sino también anticiparse a futuras necesidades, mejorando progresivamente el servicio para toda la ciudad. La JAPAY, bajo este nuevo liderazgo, parece estar dispuesta a poner manos a la obra y encarar los desafíos que vengan.